Los recursos hídricos se componen de aguas renovables, tanto subterráneas como superficiales. El agua dulce para la humanidad representa una pequeña parte de la hidrosfera, y de esta una pequeñísima parte es la que se consigue captar, es por eso que el término más preciso para evaluar el agua disponible es el de recursos hídricos renovables, que se refiere a la cantidad de aguas dulces subterráneas y superficiales de una cierta zona geográfica (normalmente un país o una cuenca hidrográfica), que anualmente se renuevan.
Su importancia y consumo ha incrementado a medida que las ciudades han crecido y la sociedad ha progresado.
El agua es uno de los recursos determinantes para el desarrollo de la vida y la humanidad. Dependemos de ella, no solo del consumo doméstico, que suma un 10% del consumo total de agua, también para varias actividades, como la industria (20% del consumo total o la agricultura (70% del consumo total).
El agua es un recurso limitado, ya que la cantidad de la que disponemos viene condicionada por su desigual distribución en el tiempo y espacio. En el mundo hay lugares que tienen suficiente agua, mientras que otros cuentan con graves problemas de escasez, incluso para cubrir sus necesidades básicas.
La cantidad de agua disponible sobre la Tierra, puede mantener a una población de unos 20.000 millones de personas, , es un recurso limitado a pesar de ser un recurso renovable.
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